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REFRIGERACION CON BAJA CARGA DE AMONIACO

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El pasado día 2 de diciembre, el departamento de proyectos de refrigeración y frío industrial de Centraliza Frio, invitados por la marca de equipos de refrigeración Intarcon, asistió al 1º Seminario de Refrigeración con Baja Carga de Amoniaco, organizado por AEFYT (Asocia de Empresas de Frío y sus Tecnologías) y AFAR (Asociación de Fabricantes Andaluces de Refrigeración), sobre nuevas tecnologías de refrigeración con baja carga de amoníaco (NH3, R-717).

Tecnologías de refrigeración respetuosas con el medio ambiente

En los últimos años, la industria de la refrigeración y climatización industrial ha estado investigando y avanzando en la utilización de nuevos componentes y productos naturales que ofrezcan una optima refrigeración y climatización a los usuarios, dejando la menor huella ecológica posible (Ecological Footprint). En este sentido el amoníaco se está consolidado como uno de los elementos naturales más utilizados por la industria de la refrigeración industrial, ya que es un componente que aparece de forma natural y además en bajas concentraciones es seguro para el medio ambiente. Los actuales avances tecnológicos en refrigeración con amoniaco de baja carga abren un nuevo campo de aplicaciones de este elemento en el segmento de la refrigeración comercial y el aire acondicionado, en las que anteriormente no se encontraba disponible. En este seminario se abordó la evolución del amoniaco de baja carga en España, las tecnologías disponibles y ejemplos reales de instalaciones más recientes.
Hay que sumar igualmente, que esta tecnología de amoníaco no solo proporciona una gran fiabilidad de funcionamiento, sino que también redunda en eliminar el consumo de agua en las torres de refrigeración, y los riesgos para la continuidad de la producción asociados a una eventual contaminación por legionela de las torres de refrigeración.

Amoniaco como refrigerante

El amoniaco o trihidruro de nitrógeno, es un gas incoloro que ya se encuentra en estado natural en el medio ambiente, y tiene un nulo efecto invernadero en el calentamiento global que estamos sufriendo en las últimas décadas. Sin embargo, en altas concentraciones puede tener efectos nocivos para la salud del entorno medio ambiental, por eso una eventual fuga de una instalación frigorífica puede representar un peligro químico en el entorno próximo. Las instalaciones que utilizan la tecnología de baja carga de amoníaco (low charge ammonia refrigeration), aminoran este posible peligro al concentrar menos cantidad de este elemento, disminuyendo hasta en un 70% la carga de refrigerante en algunos casos, convirtiéndose en la tecnología más puntera en refrigeración industrial teniendo en cuenta el entorno natural que intentamos proteger.

Ventajas de utilizar baja carga de amoniaco en la industria cárnica

Como ya hemos indicado, la tecnología de refrigeración con baja carga de amoníaco puede suponer hasta un 70% menos de carga de refrigerante para generar el mismo efecto frigorífico, esta proporción trasladada a la industria cárnica para la conservación de estos productos, o para los secaderos de jamones, supone en la actualidad pasar de utilizar entre 2 o 3 toneladas de refrigerante, a tan solo una concentración 50Kg de amoníaco, con lo que se consigue a su vez superar las normativas internacionales ADR y EPA.

Además, hay otras ventajas de utilizar este tipo de tecnología en las instalaciones de frio industrial de la industria cárnica, como el bajo consumo de agua, la mayor eficiencia energética y el menor coste de mantenimiento, lo que se traduce en un ahorro económico en todo el ciclo de vida del sistema

En Centraliza apostamos por la sostenibilidad, la seguridad y el medio ambiente y estamos convencidos que esta tecnología es el futuro.

  
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